Madrid (España) 21 de Sept. (MCI Colombia) – Cada fabricante posee su propio olor, una fragancia que tiene muchísimas horas de trabajo de cara a conseguir un aroma que impacte en el conductor, causando sensanciones y creando una imagen de marca olfativa. Pero ese olor a coche nuevo está a punto de decir adiós para siempre, pues a partir de 2021 se pretende endurecer la normativa en tanto al uso de materiales para el interior de los coches, afectando esto a los compuestos y sustancias que dan vida a ese característico olor. Este proceso de liberación de sustancias es lo que se pretende reducir con la puesta en marcha de nuevas regulaciones, controlando de forma más precisa la composición de los materiales y su comportamiento a la hora de descomponerse y liberar sustancias. Y cuando hablamos de materiales nos referimos a los tejidos, adhesivos, polímeros, tratamientos, etc.
La intención por parte de los organismos reguladores es eliminar el uso de compuestos orgánicos volátiles (COV) como el acetaldehído, acroleína, benceno, etilbenceno, formaldehído, estireno, tolueno y xileno. Países como Corea del Sur, Japón, Rusia o China ya han realizado estudios y puesto en marcha iniciativas para reducir la presencia de COV, siendo Europa el próximo mercado que podría tomar cartas en el asunto tras el informe de la UNECE donde se realizan una serie de recomendaciones para reducir el uso de COV en los habitáculos. Aún así, será China a partir de Julio de 2021 quien más limitaciones imponga al uso de materiales de este tipo.
Con todo ello se busca eliminar la presencia de químicos y reducir el impacto en el medioambiente y en nuestra salud, favoreciendo así atmósferas limpias de alérgenos.

